Programas de desarrollo personal, neoliberalismo y técnicas sin respaldo científico
En las empresas ferroviarias, como en tantas empresas públicas y privadas, se han puesto de moda los cursos de desarrollo personal, liderazgo y de gestión directiva.
No estamos en contra de este tipo de formación. Quienes hemos sufrido en algún momento de nuestra vida laboral a un jefe o a una jefa con poca capacidad, sabemos de la importancia que tiene formar al personal de jefatura en gestión de equipos, psicología básica, empatía y liderazgo.
Pero en estos cursos de liderazgo y creación de equipos, no solo abundan los palabros en inglés (team building, on boarding, coach, coachee…), sino también planteamientos neoliberales y técnicas sin base científica que no deberían tener cabida en las empresas públicas.
Muchos directivos de la empresa pueden estar interesados en que los trabajadores no se quejen, ni reclamen nada. Así es que es igualmente interesante convencer sutilmente al trabajador de que «está en su mano ser feliz», no buscando cambios en su trabajo, sino con una «transformación interior individual». La solución no sería la cooperación entre trabajadores para conseguir mejoras en las condiciones laborales. La solución sería «desarrollar competencias» individuales como la resiliencia, o pensar que «si quieres, puedes«.
Es habitual escuchar en estos cursos, también en ADIF y RENFE, que «estar bien está en tu mano» y que «si estás mal en la empresa» siempre puedes desarrollar tu potencial fuera», por ejemplo apuntándote a una ONG o a la universidad, o presentándote a una oposición o actualizando tu CV en LinkedIn.
Si tienes un problema tu solo, y el resto de los que te rodean están bien, pues quizás puede ser que lo soluciones trabajando en ti mismo. Pero si TODO EL MUNDO que te rodea está descontento, y mal, pues quizás la manera de arreglarlo es hacer equipo y buscar salidas TODAS JUNTAS. No es un problema individual, es social.
Estar descontento no es malo por sí mismo. Ser rebelde y vivir de acuerdo a tus valores no es malo por sí mismo. Y si te estás enfrentando a una situación de acoso laboral, o han intentado negarte tus derechos laborales, la solución no es pensar que está en tu mano llevarlo mejor y que debes cambiar tu actitud o no ser tan quejica
Además de esta ideología neoliberal de la sumisión y del invididualismo, los cursos de este tipo son una puerta de entrada para terapias sin respaldo científico.
Si una terapia no tiene probada su eficacia en todos los casos, entonces no debería recomendarse de forma general en un curso de una empresa. Que a algunas personas les funcione no significa que a todo el mundo le vaya a ir bien, por lo que es mejor, en cursos que se hacen para todo tipo de públicos, atenerse exclusivamente a las prácticas cuya efectividad esté ampliamente reconocida en todas las áreas de la práctica médica
En muchos de estos cursos, también en las empresas ferroviarias, se tratan patologías psicológicas que solo pueden tratar psicólogos titulados y en ningún caso un «coach».
Los psicólogos y las psicólogas hacen una labor fundamental para cuidar nuestra salud mental y quienes hemos acudido a ellas en algún momento de la vida sabemos lo mucho que aportan y lo importante que es romper el estigma social de recibir asistencia sanitaria psicológica.
Pero al mismo tiempo, como dice Ramón Noguera, algunas veces, vamos al psicólogo cuando lo que sobre todo necesitamos es afiliarnos a un sindicato de clase.
Queremos formación en gestión de equipos y liderazgo, pero la queremos de calidad, sin ideología neoliberal y basada siempre en criterios científicos
Amén